20 febrero 2013

YOGA PARA BEBES Y NIÑOS PEQUEÑOS



El yoga para bebés es una actividad que pueden realizar madres y padres junto a sus bebés. La práctica de esta disciplina es beneficiosa tanto para el bebé como para el adulto. Favorece la conexión emocional entre el bebé y sus padres, así como la relajación y el bienestar físico y emocional de la familia que lo practica. Además, es un hábito saludable que puede transmitirse al bebé prácticamente desde el nacimiento.
  
El yoga es una actividad recomendable para bebés
Muchas mujeres comienzan a practicar yoga durante el embarazo por los beneficios que esta disciplina aporta en la gestación. Otras ya lo practicaban antes de quedarse embarazadas y continúan practicándolo durante el embarazo. En ambos casos, muchas madres quieren seguir practicando esta actividad tras el nacimiento de sus bebés y compartirla con ellos. Por este motivo se ideó el yoga para bebés.
El yoga para bebés es una forma de que las madres (o padres) practiquen yoga junto a sus bebés. En las clases de yoga para bebés se practican asanas (posturas) y pranayamas (respiraciones) para el adulto, por una parte, y para el bebé, por otra. Asimismo, se practican relajaciones y meditaciones conjuntas del adulto con el bebé.
Las familias pueden comenzar a asistir a clases de yoga con sus bebés cuando éstos tienen en torno a 2 meses de edad. Sin embargo, puede practicarse yoga con el bebé en casa desde el nacimiento, realizando asanas y meditaciones con el bebé en brazos o portándolo en un fular. No obstante, es recomendable asistir a una sesión de yoga con bebés de 0 a 3 meses antes de practicar yoga con el bebé en casa.
Con bebés menores de un año de edad, es el adulto el que realiza los movimientos al niño. A partir del año, la participación del niño en la sesión de yoga es más activa. Las sesiones se dirigen específicamente para los niños a partir de que éstos tengan 3 años de edad.
 El bebé aprende desde muy pequeño las técnicas y actitudes que sus padres utilizan para cuidar su salud.
El bebé disfruta del contacto con sus padres en estado de relajación, lo cual favorece la propia relajación del pequeño.
El yoga favorece el desarrollo psicomotor del bebé debido al conocimiento y control del propio cuerpo, la coordinación psicomotriz, la adquisición de un buen tono muscular, etc.
El yoga con bebés aporta, también, muchos beneficios a los padres que lo practican:
Permite a la reciente madre continuar practicando yoga sin tener que separarse de su bebé para ello, a la vez que disfruta de una actividad beneficiosa tanto para ella como para su hijo.
Ayuda a la madre a recuperarse físicamente tras el parto.
Fomenta el vínculo entre los padres y el bebé. Realizar actividades juntos siempre es positivo.
Ayuda a los adultos a mantenerse relajados en condiciones que no son propicias para ello, como cuando un bebé está llorando.
La relajación que el yoga aporta a los padres que lo practican es esencial para la crianza de los hijos. Los padres que mantienen una actitud relajada y positiva en su vida podrán criar a sus hijos sin tensiones, de una manera equilibrada.
 Esta disciplina milenaria nacida en la India puede practicarse desde los primeros días de vida de una persona, lo que le brindará un completo método de salud física y mental.
El yoga es una ciencia práctica de vida que ha evolucionado a lo largo de miles de años y que sigue haciéndolo de acuerdo con las necesidades del hombre de hoy, ya que estimula el equilibro físico y emocional.
Su práctica beneficia muchos puntos a tener en cuenta para la salud de tu bebé.

Repasemos los beneficios que te brinda el practicar Yoga con tu hijo:
- Ayuda al sistema respiratorio
- Estimula puntos energéticos de los pies
- Brinda contención
- Ayuda a conciliar mejor el sueño del bebé
- Le produce relajación al niño
- Previene el estreñimiento
- Estimula el contacto con tu hijo
- Otorga fuerza y flexibilidad
- Tonifica y fortalece los músculos
- Incrementa la circulación y la coordinación motora
- Fortifica los tendones y los nervios
- Fortalece los órganos internos
- Regula el sistema digestivo

Existen tres herramientas fundamentales para tener en cuenta a la hora de realizar la práctica con tu bebé, estas son:
1- Háblale constantemente con dulces palabras para que se sienta conectado contigo en todo momento.
2- Ponle su música favorita o cualquier otra que ayude a la relajación del niño.
3- Apóyalo en la manta que acostumbra usar y deja algunos de sus juguetes cerca para que se sienta cómodo.

Te aconsejamos que busques un lugar ventilado y con luz tenue para practicar el Yoga, realizarlo en el suelo es beneficioso para evitar las posibles caídas.
Hazle suaves masajes a tu hijo por todo su cuerpo, comienza por los pies que son la base para lograr una buena postura, luego continua por las piernas, el abdomen y los brazos, hasta llegar a la cabeza.



 Ejercicios de estimulación temprana para bebés de 0 a 3 meses

Se trata de ejercicios que intentar despertar sus sentidos: colores, olores, formas, etc. Por eso, vamos a hacer estas actividades físicas con él:
Agita el sonajero cerca del bebé pero moviéndolo de un lado a otro de la cabeza.
Con el bebé en tu regazo, juega con él a saltar, balancearlo, columpiarlo. Esto le facilitará el gateo.
Sentado o acostado sobre cojines, pon juguetes adaptados a su edad para que experimente con ellos.


Ejercicios de estimulación temprana para bebés de 4 a 6/9 meses
A partir del tercer mes, podemos hacer movilizaciones de las manos. Juega con sus deditos, sepáraselos y acaríciaselos.
Ejercicios de incorporación: Acostado boca arriba, sujétale los pies con una mano y con la otra cógele las manos. Empieza a levantarlo. Notarás como él hace fuerza para arriba. Un poco antes de llegar a estar en vertical, ayúdale con un tirón. Notarás como vuelve a hacer fuerza para incorporarse de pie.
Levantando tu bebé hacia arriba cogido en el espacio comprendido entre las axilas y la cintura, trabajará la musculatura lumbar y del cuello. Intenta mantenerlo en postura horizontal mientras te observa. Le estás preparando para el gateo.
También hay gimnasios de ejercicios muy atractivos pues además de poner en forma su cuerpo, estimulan la percepción visual y auditiva.


Ejercicios de bebés de 9 a 12 meses
Llegan los primeros intentos de caminar. Ayúdalo a dar pasos hacia adelante.
Estimúlale jugando: Si le animas y haces que se divierta, el niño evolucionará más rápido en sus primeros pasos. Puedes ponerle música mientras da los pasos, hacerle saltar sobre un cojín o jugar con él mientras aprende a andar.
Pero también hay que ejercitar las manos: Dale objetos blandos para que los toque y los lance desde la silla o la trona y,  en cuanto sepa coger un lápiz, déjale que garabatee hasta que se canse.
Recuerda que cada bebé lleva su propia evolución. Puedes adaptar estos ejercicios al desarrollo de tu bebé.

Los ejercicios de estimulación temprana en los bebés, entre ellos la inclusión de ciertos asanas propios de yoga, son algunas de las técnicas y programas para proveer una estimulación sensorial.

Este tipo de programas, contribuyen al desarrollo de las capacidades físicas y mentales del bebé, promoviendo el crecimiento de niños sanos. Los programas de estimulación temprana favorecen el aprendizaje del bebé y la integración con el entorno. Tanto el yoga como otras técnicas de estimulación temprana pueden ayudar a tu bebé en su crecimiento y desarrollo, especialmente a nivel de la psicomotricidad.
Debido a que los beneficios de la estimulación temprana son indudables tanto para los bebés sanos o  aquellos bebés que poseen algún tipo de discapacidad los diferentes programas  de estimulación temprana comparten algunas técnicas con ciertas similitudes entre sí.
Muchas universidades y escuelas de fisioterapia han desarrollado sus programas de estimulación temprana, y puedes consultar con tu pediatra respecto a la inclusión de tu bebé en algún programa de estimulación temprana. Muchos de los ejercicios podrás realizarlo en tu propia casa y será un momento muy bueno para ti y tu bebé.

Los estudios han mostrado que la estimulación temprana en los bebés incide ampliamente en el desarrollo futuro. Además, podrán ambos beneficiarse de ese momento que disponéis para estar con tu bebé, al permitirte un tiempo de contacto más intenso con tu pequeño, que lo hará sentirse más contenido y amado, algo vital para crecer sano y feliz tanto desde el punto de vista físico, mental y emocional.
 Ejercicios generales para bebés

Es recomendable comenzar a los tres o cuatro meses, iniciando con ejercicios para fortalecer los brazos y las piernas, se debe iniciar estos ejercicios
Serán suficientes 10 minutos al día, luego podrás ir incrementando el tiempo de a poco. El momento ideal es después del cambio de pañales, y jamás después de comer. Debes sujetarlo con firmeza y suavidad al mismo tiempo, ya que sus articulaciones son aún muy delicadas. Tu bebé disfrutará aún más esta sesión de gimnasia, si la acompañas de  mimos y palabras cariñosas con masajes y movimientos ligeros de brazos y piernas. 

La gimnasia para bebés es beneficiosa también para su sistema digestivo, circulatorio e inmunológico, favorece a los músculos y los prepara para actividades como el gateo o los saltos. Es bueno que lo acostumbres a una rutina e intentar que se adapte a la secuencia ejercicio, baño, sueño, para que tenga un sueño más fácil y tranquilo. Lo primero que debes hacer es buscar un lugar acogedor en tu casa y comenzar a disfrutar esta sencilla sesión de ejercicios con tu bebé.




Algunos ejercicios
1. El primer ejercicio es mover sus brazos en diferentes posiciones: el bebé debe estar boca arriba y los movimientos debes hacerlos lentamente, en cruz, al centro, los dos al mismo lado, arriba, abajo, etc., puede que al comienzo el bebé se resista pero tú encontrarás la forma en la que él se relaje, haciendo los movimientos más lentos o rápidos, encontrando la forma en la que a él le gusta más.

2. Continuamos acomodando al bebé boca abajo con las piernas estiradas y los brazos a los lados. Lleva los brazos lentamente hacia delante y él mismo levantará la cabeza. Puedes hacerlo más llamativo para tu bebé, si le colocas un juguete frente a él.

3. Pon a tu bebé boca arriba y tómalo por las muñecas dejando que se agarre de tus pulgares. Cruza sus bracitos suavemente sobre su pecho, mantenlos así unos segundos y, a continuación, los estiras hacia fuera. Es un ejercicio muy bueno para fortalecer los músculos de los brazos y los hombros del bebé.

4. Coloca tu bebé boca arriba, toma ambos pies, y cruza las piernas  y haz que suavemente se acerquen al vientre. Luego separa sus piernitas, extiéndelas, y nuevamente repite el ejercicio.

5. Este ejercicio hay que practicarlo con muchísimo cuidado, y no antes de los 6 meses, ni durante más de 3 segundos. Sirve para fortalecer su columna vertebral. Tomas a tu bebé firmemente de los tobillos, y lo dejas 2 a 3 segundos de cabeza, luego, cuidadosamente lo vuelves a colocar en la colchoneta.

6. Boca arriba sujeta al bebé por los tobillos, estira y flexiona sus piernitas alternativamente, primero la izquierda, y luego la derecha, como si pedaleara. Luego se las flexionas a las dos al mismo tiempo, aproximando sus rodillas a la pancita. Esta suave presión le ayudará a eliminar gases.

7. Las caricias en la planta del pie le transmiten nuevas sensaciones, básicamente para su desarrollo. Si tomas su pantorrilla con una mano y pasamos el dedo índice de la otra por la cara interna de los dedos, tu bebé los cerrará automáticamente. Para que los abra, rózale con suavidad el empeine.
  
Postura de rodillas contra el pecho
Esta postura ayuda a tu bebé a aliviar de los tan comunes y molestos cólicos y gases.
Esta es una postura simple que no requiere grandes explicaciones. Sin embargo, ten en cuenta que siempre es recomendable consultar con el pediatra, ante cualquier duda y por la presencia sostenida de este tipo de cólicos.

La posición de rodillas contra el pecho es una asana inducida de yoga especialmente indicada a los bebés para la eliminación de cólicos y gases pero haz de tener en cuenta que por beneficiosa que sea la estimulación temprana del recién nacido, antes de realizar cualquier práctica de ejercicios, incluidas las asanas recomendadas de yoga, debes consultar con su neonatólogo y/o pediatra siempre.
Esta asana contribuye además a:
-       Elongar los músculos de la espalda y el cuello.
-      Fortificar los músculos del abdomen.
-      Favorece el aumento de la flexibilidad a nivel de las caderas y las rodillas.
Esta es una posición que seguramente, habrás inducido muchas veces al cambiarle los pañales o simplemente higienizar a tu bebé. Sin embargo, como con otras asanas inducidas, debes ser muy cauto y no forzar o irritar a tu bebé al realizar esta postura.

  Los niños duermen a menudo en esta posición: bocabajo, las piernas dobladas muy cerca del cuerpo, el torso encorvado hacia delante y la cabeza apoyada en sus manitas. Esta postura sirve para relajarnos.
La flexibilidad de los bebés les permite inclinarse fácilmente hacia delante para cogerse los pies. En esta postura lo ideal es mantener la columna estirada y recta. Ayuda a dormir mejor y reduce la tensión arterial alta.

Antes de empezar a desplazarse, cuando dejan al bebé tumbado boca abajo, ejercita sus músculos, apoyándose en sus brazos para levantar el torso. Es muy beneficiosa para la columna vertebral y para mejorar el ánimo.

Para el bebé es una postura cómoda. Baja la cabeza, eleva el culete y apoya las manos y la cabeza en el suelo. El corazón se descarga, el cerebro recibe más riego sanguíneo y las piernas se fortalecen.

Cuando los bebés se sienten felices acercan sus piernas al cuerpo. Es la postura del «escarabajo muerto». Facilita la digestión y estira la espalda y las caderas.

NO DUDES EN COMENZAR CON TU BEBE O NIÑO PEQUEÑO A PRACTICAR LA ESTIMULACION TEMPRANA A TRAVÉS DEL YOGA.
AQUÍ HAY UNA COLECCIÓN DE VIDEOS CON EXPERIENCIAS EN YOGA Y EJERCICIOS EN NIÑOS EN DISTINTAS ETAPAS DE DESARROLLO.




FUENTE:

No hay comentarios:

Publicar un comentario