04 agosto 2011

ENSEÑANZAS DE SHANTIDEVA


La Enseñanza de Shantideva sobre la Gran Compasión, la Tolerancia y el Remedio para la Cólera
-Sabio Indio, Siglo 8º Era Cristiana –
Cualesquiera que sean mis acciones virtuosas,
La devoción a los Budas, la generosidad y demás,
Acumuladas a través de miles de eones,
Todas son destruidas en el momento de furia.
No hay pecado tan dañino como el odio,
Ni penitencia tan efectiva como la tolerancia,
Así que, por todos los medios posibles deberé
Cultivar con intensidad la tolerancia.
Manteniendo la mente herida por el odio,
Nunca experimentaré paz,
No tendré goce ni felicidad,
Perderé el sueño y me retorceré en descontento.
Incluso un señor cuya magnanimidad sea vital
Para aquellos a los que les da riquezas y estatus,
No menos está en peligro de ser matado,
Si tiene odio por ellos.
El odio nos separa de nuestros amigos y parientes;
Aunque estén atraídos por lo que se les da, nunca confiarán en nosotros.
En síntesis, no hay forma de vivir juntos
Felizmente con el fuego de la rabia.
La cólera es mi verdadero enemigo,
Crea tales sufrimientos como estos.
Pero quien la controla y conquista
Encuentra felicidad en el presente y en el futuro.
El odio encuentra su alimento en la incomodidad mental
Que siento, cuando me enfrento con los sucesos no deseados
Y con el bloqueo de lo que quiero que pase;
Entonces explota y me agobia.
Al ver eso, debo cuidadosamente eliminar
Ese alimento que le da vida al enemigo;
Porque ese enemigo no tiene actividad de ninguna clase
Que no sea la de causarme daños.
Cualquier cosa que pase, no debo permitir
Que mi contento sea perturbado.
El ser infeliz no hará cumplir mi deseo
Y perderé todas mis virtudes.
¿Por qué ser infeliz acerca de algo
Si no puede ser solucionado?
¿Y si no puede ser solucionado,
Cómo puede ayudar ser infeliz?
Indeseados por mi y mis amigos
Son los sufrimientos, los desprecios,
Las palabras duras, y las faltas de respeto;
Para los enemigos es justamente lo opuesto.
El motivo de la felicidad algunas veces ocurre;
Los motivos del sufrimiento son muchos.
Pero sin sufrimiento no hay trascendencia,
Así que, ¡Oh mente mía, tienes que ser valiente!
Sin sentido, penitentes y arrepentidos
Soportamos las sensaciones de las cortadas y quemaduras;
¿Por qué entonces, Oh mente mía, estás temerosa
De sufrir por el bien de la liberación?
No hay nada que no pueda llegar a ser
Fácil de cargar a través de una práctica constante;
Así que, practicando con un poco de dolor,
Deberías aprender a sobrellevar grandes dolores.
¿Quién no ha experimentado esto con dolores accidentales,
Picadas de insectos o serpientes,
Ansias de sed y hambre y así sucesivamente,
E irritaciones tales como erupciones?
No debo llegar a ser intolerante
De tales cosas como el calor, el frío, la lluvia y el viento,
La enfermedad, la muerte, la esclavitud y los contratiempos;
Porque ellos sólo añaden dolor.
Algunos llegan a ser, incluso, más valientes y heroicos
Cuando ven el derramamiento su propia sangre;
Otros se sienten desmayar y así lo hacen completamente
Justo al ver el desangrar de otros.
Estas cosas vienen de la mente,
Ya sea si sus hábitos son valientes o tímidos;
Por lo tanto, debo ignorar los daños
Y no dejar que los sufrimientos me toquen.
Incluso aunque ellos experimenten sufrimientos
El sabio no deja que la mente se nuble o se agite;
Además, al hacer la guerra,
La batalla traerá mucho daño.
Ignorando todos los sufrimientos,
Conquistando los enemigos tales como el odio,
Estos son los héroes verdaderamente victoriosos –
El resto son simplemente cadáveres de matadero.
Además, el sufrimiento tiene sus beneficios;
Estar cansado de él disipa nuestra ignorancia,
Remueve nuestra compasión por las criaturas cíclicas,
Y nos hace evitar el pecado y amar la virtud.
Yo no estoy enojado con las causas mayores
Del sufrimiento, los humores-enfermos tales como la bilis,
Así que, ¿por qué estoy enojado con los seres mentales,
Todos dirigidos por condiciones como estas?
Al igual en todo momento, involuntariamente
Esta enfermedad inevitablemente ocurre,
Así que, en todo momento involuntariamente
Adiciones surgen compulsivamente.
No pensando, “Debo encolerizarme”,
Las personas, incapaces de actuar efectivamente, sienten furia;
Y no pensando, “debo desarrollarme”,
La furia misma, automáticamente, se desarrolla.

Cualquiera de las maldades que puedan ser encontradas
Y las variadas clases de pecado,
Todos surgen por la fuerza de las condiciones,
Y de ninguna forma voluntariamente.
Aquellas condiciones que se unen
No tienen la intención de decir “produzcamos daño”,
Ni sus productos dañan ellos mismos, ni se proponen:
“Voy a estar produciendo”.
Incluso los agentes postulantes, “el alma que lo llena todo”,
Y el teoréticamente imaginado “yo”,
Nunca actuarían pensando voluntariamente:
“Debo surgir como la causa del daño”.
Dado que tales son improductivos y no-existentes,
Así también su voluntad para producir (daño o cualquier acción),
Y considerando que su enfoque en sus objetos debe ser permanente,
Nunca podrá llegar a terminarse (en acción).
Si el ‘yo’ fuera permanente, (como se ha alegado),
Él claramente debería ser inactivo al igual que el espacio,
Incluso al encontrarnos con otras condiciones
¿Qué podría hacer sin cambiarse a si mismo?
Y si cuando actúa sobre eso se mantiene igual que antes,
Entonces, ¿Qué afectaría la acción?
Aunque decimos, “Esta es la acción de esto”,
¿Cuál posiblemente sería su relación (con cualquier cosa)?
Así que todo está en el poder de otras cosas
Y ellas mismas en el poder de otras más;
Conociendo esto, nunca me encolerizaré
Con las cosas, ya que son tan irreales como las apariciones.
“Si todo fuera irreal, ¿qué es eliminado y por quién?”
Seguramente eliminar la cólera sería irracional.
No es impropio eliminar la cólera, si quieres
Interrumpir la corriente continua del sufrimiento.
Así que, si veo un enemigo o un amigo
Hacer algo erróneo,
Mantendré mi buena jovialidad, pensando,
“Esto viene de las condiciones mecánicas.
Si eso pasara voluntariamente,
Dado que nadie quiere sufrir,
Ningún ser corporal, cualquiera que sea,
Nunca experimentaría el sufrimiento.”
A través del descuido,
Las personas se hieren ellos mismos con espinas y otras cosas,
Y también, para ganar una mujer y demás,
Ellos llegan a ser obsesivos y se consumen.
Algunos se suicidan tirándose de los precipicios,
Tomando veneno y comida corrupta,
Y se hieren ellos mismos
Con actos despreciables.
Si en el poder de las emociones adictivas
Ellos matan incluso a sus apreciados ‘yos’,
¿Cómo podrían fracasar en causarle daño
A los cuerpos de los otros seres?
Así que, dominados por las adicciones,
Cuando ellos tratan tales cosas como el matarme,
Quizás es muy difícil sentir compasión,
Pero, ¿cuál es el objetivo de encolerizarse?
Si es natural para el inmaduro
Causar daño a otros,
Es un error encolerizarse con ellos,
Como igualmente sería, enojarse con el fuego por quemarnos.
Incluso si los seres son gentiles por naturaleza
Y la maldad de dañar es ocasionalmente,
Todavía es erróneo encolerizarse;
Como lo sería, resentirse con el espacio por llenarse de humo.
Aunque los palazos y demás realmente me duelen,
Me enfado con él que los tira;
Pero él, es también un instrumento tirado por el odio,
Así que solamente estoy correctamente enfadado con el odio.
Hace tiempo ocasioné
Daño de esta clase sobre seres,
Causándoles de esa manera perjuicios,
Ahora este daño regresa a mí.
Su arma y mi cuerpo
Ambos, son la causa de mi sufrimiento;
Él construyó el arma, yo el cuerpo,
¿Con cuál de ellos debo estar enojado?
Ciego y con anhelos, si me apego
A esta forma humana, estoy propenso al sufrimiento,
Agonizando al toque, como él de la herida abierta,
¿A quién odiaré cuando duela?
El inmaduro no quiere sufrimiento
Sin embargo, la sed por las causas del sufrimiento
Y demás, son daños para su propia maldad;
¿Qué es el resentir en los otros?
Al igual que los guardianes en los infiernos
Y en los bosques de hojas afiladas como cuchillas,
Este dolor es producido por mi propia evolución.


¿Con quién debo estar enojado?
Impulsado por mis acciones evolutivas
Otros llegan para dañarme;
Cuando eso los envía al infierno,
¿No he causado yo sus caídas?
Confiando en ellos con tolerancia,
¿No me purgo a mi mismo de muchos pecados?
Sin embargo, cuando ellos se relacionan conmigo dañándome,
¿No sufren ellos por mucho tiempo los dolores del infierno?
Dado que así los perjudico,
Y así ellos me benefician,
¿Por qué tan perseverantemente, mente salvaje,
Sientes cólera hacia ellos?
Sin embargo, si tomo represalias dañándolos,
Eso no servirá para protegerlos;
Mi propia conducta será destruida,
Y toda mi disciplina no servirá para nada.
Mi mente no está encarnada,
Así que nadie puede conquistarla en ninguna forma;
Pero su apego profundo al cuerpo
Deja que ella se dañe por los sufrimientos del cuerpo.
Pero dado que el desprecio,
Las palabras duras y las disputas
No pueden nunca perjudicar al cuerpo,
¿Por qué, mente, te colerizas tanto?
¡Porque otros tendrán aversión hacia mí!
Pero eso no me consumirá
Ni en esta vida ni en la próxima;
¿Así que por qué debo tener aversión hacia ellos?
“¡Porque interrumpirá mi ganancia mundana!”
Incluso, si no me gusta eso,
Dejaré mi ganancia aquí detrás de mí,
Mientras me iré cabalgando sobre mis pecados.
Mejor que muera ahora,
Peor que viva largo tiempo por acciones malignas;
Aunque pueda subsistir por bastante tiempo,
La realidad sale a flote en el sufrimiento de la muerte.
Sueñan sobre la felicidad por cien años.
Y entonces despiertan.
Sueñan sobre la felicidad por un instante,
Y entonces despiertan.

En ambos despertares
La felicidad no regresará;
Ya sea si la vida es larga o corta,
Al igual en la muerte, ella finaliza lo mismo.
Incluso, si gano una gran fortuna
Y disfruto la felicidad por un largo tiempo,
Al igual que si fuera robado por un ladrón,
En la muerte, voy destituido con las manos vacías.
Si vivo y tengo una buena fortuna,
Puedo borrar el pecado y acumular mérito.
Pero si uso la cólera para obtener esa fortuna,
¿No estoy consumiendo todo el mérito y ejecutando el pecado?
Si estoy destruyendo el mérito mismo
Con el fin estar vivo,
¿Cuál es el uso de vivir,
Cuando todo lo que hago es intensificar mis pecados?
“¡Yo debo encolerizarme cuando las personas me difaman,
Dado que ellos con eso arruinan la confianza de los otros!”
¿Entonces por qué ustedes no se encolerizan también
Cuando ellos difaman a los otros?
Cuando la deficiencia apunta a los otros,
Puedo tolerar la falta de confianza;
Pero... ¿por qué no puedo tolerar la difamación,
Cuando apunta justamente a mis adicciones mentales?
Para las personas que difaman o incluso destruyen
Los iconos, los monumentos sagrados, o las Escrituras,
Mi odio seria inapropiado,
Dado que los Budas y tales no pueden ser dañados.
Debo detener mi cólera hacia las personas
Que dañan a mentores, parientes, y amigos,
Mirando, como en los casos anteriores
Como ella sube desde las condiciones mecánicas...
Cuando haya entendido esto,
Debo hacer mérito escrupulosamente,
Usando cada forma para cambiar a cada uno
Hacia las actitudes mutuamente amorosas...
Si otros sienten placer en alabar
A una persona excelente (quien es mi rival),
¿Por qué no tú también, Oh mente mía,
Sientes placer en alabarlo?
Cuando mi excelencia es discutida,
Quiero que otros sean felices también;
Pero cuando la excelencia de otros es el tópico,
Yo no quiero, incluso, ser feliz.
Dado que admití el espíritu de la Iluminación
Queriendo que todos los seres encuentren la felicidad,
¿Por qué he de encolerizarme
Cuando ellos la encuentran por ellos mismos?...
Si no me gusta que los otros obtengan cosas buenas,
¿Dónde está mi espíritu de iluminación?
¿Cómo pude haber tenido ese espíritu
Si me encolerizo acerca de la fortuna de otros?
El alabar y demás son solamente distracciones,
Ellos destruyen mi desengaño con el ciclo de la vida,
Remueven mi rivalidad con la excelencia
Y destruyen mi oportunidad de lograr el éxito verdadero.
Así que aquellos que tienen por meta destruir
Mi reputación y demás,
¿No están también ellos profundamente comprometidos
En prevenir mi caída hasta lo más profundo?
Dedicado a lograr la liberación,
No necesito obtener obligaciones de ganancias y estatus.
Cuando alguien me libera de ellas [obligaciones],
¿Cómo puedo resentirlo?
Aquellos que quieren que yo sufra
Son como Budas bendiciéndome,
Ellos me elevan más allá de todo peligro,
¿Por qué debo resentirlos?
¿Pero, si él obstruye mi ganancia de méritos?
No es correcto estar encolerizado con él, incluso entonces,
Porque no hay penitencia tan buena como la tolerancia,
¿Y no me ayuda él a vivir en ella?
Si yo, por mis propias faltas,
Fracaso en permanecer tolerante hacia él,
Finalmente sólo me he obstruido a mí mismo
Por haber usado esta ocasión para mérito.
Si una cosa no pasa sin la otra,
Y ella no sucede cuando la otra está presente,
Esa otra cosa es la causa de lo que pasa;
¿Cómo puede la otra cosa llegar a ser su obstructora?
Cuando yo hago un regalo, el recipiente
No obstruirá mi generosidad.
Los conferidos a una graduación monástica
No la obstruyen [la graduación monástica].
Hay muchos recipientes en este mundo
Pero es raro él que causa daño;
Si yo no les causo a ellos daño,
Los seres, como de costumbre, no me dañaran.
Por lo tanto, debo regocijarme en mi enemigo;
Él me ayuda a practicar la iluminación,
Justamente siendo como un tesoro encontrado en el hogar
Sin tener que ir afuera a buscarlo.
Puedo practicar la tolerancia con él;
Así que ‘él’, merece mi primera ofrenda:
Los frutos de la tolerancia para él,
Dado que él, es la causa de la tolerancia.
“¡Pero ese enemigo no merece tal veneración,
Dado que no intenta que yo practique la tolerancia!”
Entonces, por qué venerar el Dharma sagrado,
Dado que él también es solamente la causa de mi práctica.
“¡Pero ese enemigo no debe ser venerado
Dado que no tiene la intención de dañar!”
¿Cómo puedo yo practicar la tolerancia
Si todo el esfuerzo solamente me ayuda, justo como los doctores.
Así que, dado que la tolerancia se desarrolla
Confiando en aquellos con odio en sus corazones,
Ellos están engalanados para la veneración así como el Drama sagrado,
Dado que ambos son la causa de la tolerancia.
Por lo tanto el Muni dijo
La poesía del Buda es el mundo de los seres;
Los muchos que han satisfecho esos seres
Han, por lo tanto, logrado la trascendencia.
Los seres y los Budas son iguales
Porque ambos son el origen del logro de las cualidades Budísticas;
Al igual que adoro a los Budas,
No hay forma de no adorar a los seres...
Más adelante, dado que los Budas son los verdaderos seres amigos,
Quienes logran sus beneficios inmensurables,
¿Qué otra forma hay para pagar esa gentileza
Sino amar y santificar a esos seres?
Habiendo dado sus cuerpos y entrado al infierno por los seres,
La gratitud para los Budas significa ayudar aquellos seres mismos,
Así que incluso si los seres causan grandes daños,
Debo tratarlos a todos con la bondad más ingeniosa.
Cuando los seres están felices, los Budas están complacidos;
Cuando ellos están perjudicados, los Budas están perjudicados.
Amaré a los seres y deleitaré a los Budas;
Porque si los daño, dañaré a los Budas.
Al igual que los sentidos pueden encontrar molestias
Cuando el cuerpo es abrazado por las llamas,
Así cuando los seres son dañados
No hay forma de deleitar al Compasivo.
Así que, dado que he dañado a esos seres,
Y causado molestias al Compasivo,
Me arrepiento y confieso esos pecados,
E imploro tu indulgencia por tales molestias.
Para poder complacer los señores trascendentes,
De ahora en adelante me controlaré a mí mismo y serviré al mundo,
Dejaré que los muchos seres me pateen, pisoteen mi cabeza, o me maten—
Qué los Sabios del Mundo se regocijen porque yo no tomo represalias...
Porque no puedo ver que todo llega de complacer a los seres vivientes,
No sólo mi logro futuro de la Budeidad,
Sino también la gran gloria, la fama y la felicidad
En esta misma vida.

Incluso en los seres periódicos, la tolerancia confiere
Belleza, salud y fama,
Ayudando a una larga vida,
Y a la felicidad de un reinado universal.

La Historia de la Vida de Shantideva
En los comentarios de Geshe Tsoephel sobre el discurso de Shantideva, él apunta muy acertadamente, que el conocer al maestro nos ayuda a tener fe en la Enseñanza. Por lo tanto, él cuenta lo siguiente:
Shantideva nació al norte de Bodhgaya. El nombre de su padre era Gyel.wey Go.cha (Armadura Victoriosa), y él de su madre, Vajrayogini. Él nació con muy buenos signos. El nombre que se le dio fue Shi.we Go.cha (Armadura de la Paz). [Sánscrito: Shantideva puede traducirse al español como Divinidad de la Paz].
Durante su niñez él tenía un gran respeto por sus padres, y sus amigos tenían un gran respeto por él debido a su conducta extraordinaria. Su padre murió para demostrar que los seres sintientes están sujetos a la impermanencia, y después de esto, Shantideva desarrolló más comprensión sobre la
impermanencia y la muerte.
Cuando su padre murió, los sujetos le pidieron a Shantideva que tomara la posición de él. Él no podía rehusar esto, así que aceptó tomar la posición del rey. La noche antes de la ceremonia él soñó acerca del trono en el cual se iba a sentar. Manjushri se le presentó en el sueño y le dijo: “Vas a sentarte en mi
trono. Tú eres mi estudiante. ¿Cómo un estudiante y discípulo puede sentarse en el mismo trono?
Al despertarse de su sueño, él comprendió que él sería más beneficioso para otras personas si llegara a ser monje en lugar de rey. Esa misma noche se marchó hacia el monasterio Nalanda. Cuando llegó a Nalanda, fue a ver al abate y al principal erudito de Nalanda, Gyal.wa Lha. Entonces recibió su
ordenación, y el nombre de Shantideva. Bajo ese gran erudito y maestro, Shantideva también llegó a ser un gran maestro en los estudios, deliberando y reflexionando.
Incluso, aunque era un gran erudito, él nunca demostraba esto abiertamente a otros, así que nadie sabía sobre eso. Los estudiantes en Nalanda que no simpatizaban con él, querían que lo expulsaran del monasterio. Ellos argumentaban que el lugar estaba lleno de escolares eruditos, y decían que
Shantideva no era un erudito. Que él solamente sabía acerca de comer, dormir, e ir al baño. Así que ellos le pidieron a Shantideva que les proporcionara una enseñanza, y si no lo hacia, tendría que irse del monasterio.
Ellos le pidieron a Shantideva que les instruyera. Shantideva al principio no aceptó, sólo a la segunda petición Shantideva accedió a sus reclamos. Ellos planeaban insultarlo frente a un gran grupo de estudiantes.
Entonces construyeron un trono muy alto, asumiendo que Shantideva no sabría cómo subirse a él. También reunieron en una asamblea un gran grupo de monjes. Cuando Shantideva llegó al trono, lo tocó, y el trono se encogió, de forma que Shantideva pudiera subirse a él. Así que de inmediato eso dio un sentimiento fuera de lo ordinario al grupo -¿cómo puede pasar esto?
Entonces, Shantideva se sentó en el trono y le preguntó al grupo que clase de enseñanza debería él impartir, ¿algo que había sido enseñado antes, o algo que nunca había sido enseñado? Así que fue de esta manera que Shantideva enseñó La Forma de Vida de Un Bodhisattva.
Shantideva dio su disertación y cuando su enseñanza llegó al capítulo noveno (el Capítulo de la Sabiduría), hay una frase en este capítulo que dice, “... cualquier cosa existente o no existente...” En ese momento se levanto hacia el cielo, y desde allí, enseñó el capítulo décimo. Él era invisible para las
personas, pero aquellos (tales como los seres altamente iluminados) que tenían [clariaudiencia] pudieron escuchar sus enseñanzas.
Los monjes y las personas que simpatizaban con Shantideva se sintieron muy tristes ya que Shantideva se había ido; y aquellos que estaban en contra de él, se sintieron muy impresionados y arrepentidos acerca de lo que habían hecho.




FUENTE: Traducido al español por la Rev. Hortensia De la Torre (Yin Zhi Shakya, OHY)
"La Esencia del Budismo Tibetano" DE Robert A. F. Thurman – Editorial Castle Bookshttp://shantideva.me/about-shantideva-and-the-bodhicharyavatara/

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